Es muy
probable que la mayoría de los habitantes de éste pobre país (en sentido de
seguridad y confianza) salimos a nuestro trabajo pidiéndole al divino y a todos
los santos que nos protegías de la inseguridad que hay en nuestra región,
estado y país. Cuando vamos por la carretera y nos encontramos con algún convoy
armado. Nos preocupamos mucho y nos acordamos del lema que dice que “todos
sabemos a qué hora salimos a trabajar, pero nadie sabe a qué hora regresará”.
Cuando
escuchamos en las noticias sobre cómo ha aumentado la violencia que utilizan
los maleantes contra sus víctimas, el tenerlos secuestrados, golpeándolos, amagándolos,
quemándolos con diferentes productos e incluso amputando alguna parte del
cuerpo para que los familiares sufran. Nos imaginamos o nos preguntamos cuáles serán las causas de
tanta violencia, probablemente no hubo alguien que los educara o los orientara,
tal vez no tenían padres o eran unos padres desobligados, sin embargo les puede
pasar a todos, menos a mi familia o a mis hijos...
Diferentes
universidades Europeas de Francia y Alemania, así como de Ohio de Estados Unidos
realizaron una investigación para comprobar que usar videojuegos que contengan
violencia evidentemente esta se dispara o crece conforme se vaya desarrollando
el juego, así como la variación de veces que se utiliza de modo que demostró
que los videojuegos violentos causan aumento inmediato y de corta duración de
la agresividad.
Los
experimentos realizados en un laboratorio de la universidad de Grenoble Francia
demuestran que esos efectos son “acumulativos” y que pueden ser “relativamente
duraderos”.
¿Cómo se llevó
el estudio?
Durante
el estudio, cada día de tres jornadas, 70 estudiantes de ambos sexos jugaron 10
minutos videojuegos violentos y no violentos.
1ra Prueba:
Para
medir la violencia de su actitud, se le pidió que leyera una historia después
de haber jugado el videojuego (habíamos comentado que le podía haber tocado uno
violento o uno no violento), en la historia se narraba una parte o una escena
de un conflicto potencia, como por ejemplo, un accidente de tráfico, y se les
pedía que imaginarán las reacciones de los protagonistas.
Los
resultados:
Los
estudiantes que habían jugado un videojuego violento esperaban que los
protagonistas de la historia adoptaran un comportamiento más hostil o que se
llegara incluso a los golpes.
2da prueba:
Los estudiantes que ayudaron en
la primera prueba también participaron jugando un videojuego en el cual se
luchaba contra otro participante de la investigación.
Resultados:
Los
estudiantes que anteriormente habían participado en un videojuego violento
realizaban más daño a sus oponentes que los que no habían juagado un juego
violento.
Conclusiones:
En
todos los casos el grado de violencia que se tenía el primer día aumentaba
conforme se seguía jugando dichos videojuegos con grados de violencia.
Dicho
estudio se realizó con la colaboración de la universidad de Honhanheim
(Alemania) y del estado de Ohio (Estados Unidos). Éste estudio será publicado
el próximo número de la revista científica Norteamericana Journal of
Experimental Social Psichology.
Así
pues es importante que platiquemos con los padres de familia y sobre todo los
alumnos para que comprendan que el inconsciente se dispara cuando nos
encontramos en situaciones en donde más serenados debemos estar.
Sobre
todo la recomendación es que no juguemos videojuegos que contengan violencia
porque nuestros hijos los van a querer jugar…
Referencias e
imágenes:
10/10/2012
10/10/2012
10/10/2012
10/10/2012
http://prezi.com/rgoxd_zzggfh/copy-of-untitled-prezi/?kw=view-rgoxd_zzggfh&rc=ref-40756257